La leche de vaca, un producto básico de nuestra alimentación, día a día suma detractores ya que uno de sus componentes es la caseína, que resulta ser una proteína muy indigesta para nuestro organismo por su gran tamaño produciendo una gran cantidad de flemas en personas asmáticas.
Con la nueva cultura veggie, comienza el auge de las leches vegetales, presentadas como una alternativa saludable para nuestros desayunos.
Las leches son preparadas con semillas, frutos secos y cereales tales como la almendra, la nuez, el sésamo, el alpiste, entre otras.
Para su preparación solo necesitamos dejar durante toda una noche una taza de semillas en abundante agua para activarlas, y a la mañana siguiente licuarlas hasta obtener un liquido blanco y lechoso.
Algunas de sus virtudes son:
- Ayudan a eliminar toxinas del organismo
- Aportan antioxidantes que previenen el envejecimiento prematuro de la piel
- No contienen lactosa ni colesterol
- Aportan omega 6 y 3, que estimulan la actividad cerebral y fortalecen las defensas
- Brindan resultados favorables en casos de problemas respiratorios, diabetes y osteoporosis.
Para conservarlas, colocarlas en una botella de vidrio con tapa en heladera. La vida útil de 2 a 3 días aproximadamente. Se pueden consumir solas, mezcladas con frutas en licuados o como chocolatada.
Sana, ecológica, y hecho por nuestras manos, la leche vegetal se impone en las nuevos planes alimenticios